El teleférico

Siempre en compañia de nuestros buenos amigos vanezolanos y la comitiva de Herbalife casi testigos de Jehova con su producto, nos dirigimos al teleférico de Quito.
Aquí se demostró que tal vez los de herbalife algo de razón tienen ya que había que subir una colina bastante empinada para llegar a la entrada del teleférico y mientras que todos íbamos rezagados y con la lengua afuera, los Herbalife iban saltando y gritando por las escaleras, llegando en la décima del tiempo que el resto. Claro está que uno de sus productos es una pastillita que es como 90% cafeina!!!
Cuando llegamos la mitad no subió al teleférico por el precio: Serían unos 85 pesos argentinos por persona. Nosotros hubiésemos subido pero menores de 18 meses no podían subir por la altura, asique nos quedamos charlando con Marcos, nuestro conductor, la novia y una venezolana.
Le enseñamos a Marcos Dread Mar-I y él nos habló de un músico joven con música genial llamado Américo. Resulta que Américo canta cumbia argentina, siendo su principal hit Embrujo.
Marcos no podía creer que la canción no era de Américo.
También aprendimos que Rebecca, la venezolana tenía 17 hermanos!!!! y 42 sobrinos. Peor que la película de Steve Martin!!!!
Aunque no subimos la pasamos muy bien y cuando volvió el resto de la comitiva enfilamos para El Panecillo